Orígenes de la palabra:

En general se acepta que la palabra es de origen árabe y procede del término al-kimia, del que proviene, asimismo, el vocablo química. Pero los problemas comienzan cuando se trata de discernir en qué se basaron los musulmanes, que recibieron la alquimia, como sabemos, de la tradición greco-egipcia, para denominar así a la disciplina que adoptarían, desde entonces, como una rama más, si no la más importante, del conocimiento de la naturaleza.

Para varios escritores, la palabra kimia viene de kemt, kemet, que significa, tierra negra, es así que los egipcios nombraron a sus a tierras sobre el Nilo.

De ser cierto, la alquimia significaría: arte egipcio, podría ser el país de la “tierra negra”. Recordando el papel fundamental que juega la leyenda en la tradición alquímica, ese individuo uno de los hijos de Noe (Cam) quien fue el primer artesano y estuvo en el gran diluvio de la biblia.

Este modelo de interpretación puede ser correcto con el significado de la palabra “chaman” que proviene del hebreo que puede traducirse por “misterio”, un rasgo sin duda inseparable de las prácticas alquímicas en ese periodo , incluso con la del vocablo también hebreo “kemes”, que quiere decir sol, un astro de indiscutible protagonismo en las tareas de los adeptos al arte sacro.  Para otros autores, en alquimia se cuenta que fueron Adán y Eva y su hijo Caín, que es donde el ser humano se opone al mismísimo Dios creador del Universo.

Se dice que este arte viene de la palabra Alchimus, de un remoto profeta (de origen judío) que según textos de alquimia del s.XIII se habrían traducido del hebreo al idioma latín el eje central de este arte sagrado, pero en una fecha que no se conoce ni se conocerá.

Entre leyendas e historias:

Entre los seguidores de este arte sacro, desde sus comienzos, había un tremendo y absoluto secretismo (era muy común que solo algunos podían adentrarse en ese mundo oculto para el resto de la sociedad). Así fue, miles y miles de años antes de nuestra época, ellos, los sumos sacerdotes egipcios, según los escritos los primeros en practicarla, eran una fraternidad sagrada que solo se podía acceder una vez superados complejos y largos rituales de iniciación alquímica.

Los que llegarían a poder ser miembros, de la fraternidad, eran trasladados a las llamadas casas de la vida, es allí en donde vivían solo ellos y había un maestro que ejercía de autoridad única hasta que dignamente eran considerados, para realizar la exigente y dura prueba y si la superaban podían ingresar, esa era la única manera en esos tiempos remotos.

En este sentido muchas de la formulas, que eran para la época muy avanzadas en su estilo y composición, se transmitían solo dentro de la cofradía, tampoco se podían escribir, pero si en ocasiones quedaban con la protección de votos de silencio que se pagaban en caso de romperlo con el castigo del envenenamiento.

Pero esta no fue la única razón, se conoce que el emperador Diocleciano, mando destruir todos los documentos que fueran encontrados con contenidos alquímicos que se descubrieran en tierras de Palestina y Egipto, por el año 290 de nuestra era. Esta iniciativa fue concebida por el rumor de que en esas tierras había una receta que podría convertir los mentales comunes en el valioso oro.

Diocleciano con temor por perderlo todo, si esas personas querían podían levantar un gran ejercito en contra de Roma, decidió terminar con esas prácticas místicas.

Así se perdieron muchas obras, y un sin número de importante documentación sobre como comenzó la alquimia.

Para agregar en la ciudad de Alejandría (ciudad griega y egipcia) donde se guardaron algunos de los más valiosos textos alquímicos, también venia sufriendo constantes problemas a lo largo de los años y de los siglos venideros.

En el año 48 a. C se sabe que, bajo el mando del César, hubo un movimiento popular, mas adelante sobre el año 640 después de cristo, la biblioteca fue arrasada por el ejercito de Omar, conquistador musulmán proveniente de la provincia bizantina de Egipto. También en el año 391 Teodosio envió destruir todo resto de paganismo de la sociedad romana.

En toda esa etapa de la historia se perdió casi todo, en donde había unos 700.000 libros y manuscritos de incalculable valor histórico, con lo cual el progreso cultural se retraso unos cuantos años. En cuanto a los libros y ensayos de alquimia se perdió prácticamente todo el material que allí había.

Para la alquimia, desde los griegos y mas adelante en el tiempo también, se utilizaba la invención de la misma al muy conocido Hermes Trismegisto, que significa Hermes, el tres veces grande.

Para algunos grandes teólogos, Hermes no es ni sería sino una de las versiones griegas del famoso dios Thot (venerado en Egipto), divinidad civilizadora a la que, según las creencias de los habitantes del valle del Nilo, debía la humanidad el conocimiento de la escritura, la magia, la astrología y la medicina, pues el dios griego, hijo de Zeus y Maya, era venerado por los helenos como un sanador, guardián de los sueños, comerciante y mensajero de los dioses, pero también como inventor de la escritura y padre de la ciencia.